La resiliencia organizacional es la capacidad de una organización para absorber un entorno cambiante y adaptarse a él de modo que pueda cumplir sus objetivos y así sobrevivir y prosperar. Las organizaciones más resilientes pueden anticiparse y responder a las amenazas y oportunidades que surgen de cambios repentinos o graduales en su contexto interno y externo. Mejorar la resiliencia puede ser una meta organizativa estratégica, y es el resultado de prácticas de negocio adecuadas y de la gestión eficaz del riesgo.
La resiliencia de una organización se ve influida por una interacción y una combinación únicas de factores estratégicos y operativos. Las organizaciones pueden ser más o menos resilientes; no hay ninguna medida absoluta ni ninguna meta definitiva.
Existen disciplinas establecidas de gestión que contribuyen a la resiliencia, pero, por sí solas, estas disciplinas resultan insuficientes para salvaguardar la resiliencia de una organización. En su lugar, la resiliencia organizacional es el resultado de la interacción de atributos y actividades, así como de las contribuciones aportadas por áreas técnicas y científicas especializadas. Estas se ven influidas por la manera en que se aborda la incertidumbre, se toman y aprueban las decisiones y las personas trabajan en equipo.
Este concepto de resiliencia organizacional complementa y refuerza otras disciplinas de gestión que aseguran el éxito sostenido en el tiempo, como la buena gobernanza, la planificación estratégica, la gestión del riesgo y la gestión de la continuidad del negocio.
Todos estos campos del conocimiento han sido abordados por la Organización Internacional de Normalización (ISO) en el establecimiento de normas con requisitos, directrices y/o buenas prácticas de gestión para las mencionadas disciplinas.
En particular, ISO generó el Comité ISO/TC 292 sobre “Seguridad y resiliencia” que tiene por objeto la normalización para mejorar la seguridad y la resiliencia de la sociedad.
A su vez UNIT constituyó en 2019 un Comité Nacional espejo que aborda temas como la sostenibilidad, la resiliencia, la gobernanza, el cumplimiento legal, las políticas anti- soborno, y otros.
Este año dicho Comité espejo, de “Gestión Integral de las Organizaciones” trabajó en la adopción nacional de una serie de normas de resiliencia organizacional, publicadas por UNIT:
De esta manera UNIT proporciona a las organizaciones locales, independientemente de su tipo y tamaño, herramientas útiles para mejorar su resiliencia de manera sistemática y visible.
En el próximo mes de setiembre UNIT desarrollará un webinario, abierto al público, en el que se expondrán con más detalle los trabajos realizados, el contenido de las normas publicadas y los resultados potenciales de su implementación.